UNA BUENA COMUNICACIÓN, MARCA LA DIFERENCIA

Angie Katherine Carrillo Romero

Universidad Distrital Francisco José de Caldas – Ingeniería de Producción

Bogotá D.C. – 2017

 

"La forma en que nos comunicamos con otros y con nosotros mismos, determina la calidad de nuestras vidas"- Anthony Robbins.

Este tema suele ser muy común, a diario se puede observar ejemplos de la importancia de una buena comunicación bien sea en el ámbito laboral, familiar, académico, social, en pareja y por supuesto, con sigo mismo. La comunicación es primordial para desarrollar y mantener buenas relaciones, aun así, es muy frecuente que las personas se enfrenten a malentendidos o discusiones sin sentido, creando rupturas en las relaciones con las demás personas.

Cabe resaltar que comunicar no significa simplemente expresar pensamientos, ideas y sentimientos con los demás, adicional a esto se debe entablar un dialogo y permitir que las otras personas se expresen de la misma manera, con el objetivo de aprender de sus experiencias y desarrollar la capacidad de comprensión. Un error frecuente en la comunicación, es tratar de sobresalir en un dialogo y no permitir que otros tomen la palabra, hay que cuidarse de ser exagerados y no pasar a los extremos, tanto de hablar mucho como el de no aportar nada en una conversación. Ser coherentes, elocuentes, darse a entender y saber escuchar no es sólo un arte, sino un don que facilita la avenencia en cualquier lugar.

Teniendo en cuenta lo anterior ¿Qué elementos se deben tener en cuenta para llevar a cabo una buena comunicación? A continuación se mencionarán algunos de ellos:

·         Interés real por la otra persona. Muchas veces al entablar una conversación las personas se muestran dispersas y no prestan la suficiente atención a lo que su interlocutor quiere comunicar, este punto es esencial ya que si no se genera armonía en la conversación e interés por el prójimo, no se podrá cumplir con el propósito del mensaje y parte de la información que se esté transmitiendo se perderá.

·         Saber preguntar. En clase se suele escuchar este dicho "No hay preguntas tontas, sino tontos que no preguntan", este punto también es importante para una buena comunicación, no hay que quedarse con la duda y se debe intentar aclarar lo que se considere incorrecto, esto con el fin de evitar conflictos y resentimientos futuros.

·         Sinceridad. La libre expresión es indispensable para una buena comunicación, expresar con respeto los pensamientos y sentimientos, teniendo en cuenta los valores fundamentales que indican que es lo correcto, y aportando el punto de vista de cada una de las partes, puede hacer que se llegue a un consenso final.

·         Comprender los sentimientos de los demás: Cuando los interlocutores se ponen en el lugar del otro, procuran evitar burlas o críticas y por el contrario intentan corregir sin pasar la barrera del respeto, eso hará que se cree un vínculo más cercano entre los interlocutores y se desarrolle una comunicación más efectiva.

·         Temas interesantes: Las conversaciones superficiales no suelen aportar nada, es importante tener claro el mensaje que se va a transmitir y no pretender hablar de varios temas en el mismo momento, desviándose a temas que carecen de importancia y no aportará nada a su comunicación.

Una buena comunicación marca la diferencia en todos los aspectos de la vida, permite crear lazos difíciles de romper, aporta a la armonía, convivencia y felicidad de las personas. Es por esto que es de gran importancia el esforzarse por llevarla de la mejor manera y poder aportar al desarrollo personal y al de los demás.